26.5.09

MÁS MÁS Y MÁS

Sí, la vida es mucho más ... que fútbol.

La vida es, sobre todo, deseo de vivirla. Más y más deseo, nos decía Rafa el de La Unión a mitad de los 80. Recordáis ..



Pues bien, mañana, a partir de las 20:45, para muchos y muchas, la vida será fútbol.

Mas si por cualquier razón te apetece otra cosa, LA PALETILLA nos propone alternativas. Si no es mañana a esas horas, otro día. Pero no dejes de pasar por allí. Es, cómo mínimo, diferente. Es MUCHO MÁS QUE FÚTBOL.

3 comentarios:

Ruben dijo...

Que razón tienes ...
Pero mira, esta tarde después del curro, Ana, la Chicha (el perro) y yo, nos vamos con los frontales al monte a hacer un entreno de los largos, mientras algunos descerebrados/as estarán vociferando por las calles, tirando petardos, hacierdo sonar el claxon y las ruedas de sus coches, o no ...

Me da igual que ganen o pierdan, lo que me gustaría, es que si ganaran, los futboleros nos dejaran dormir y descansar a los que no nos va la vida en ello ...

Ruben dijo...

Releyendo mi comentario, veo que quizá he sido demasiado contundente ...jeje

Quería dejar constancia de que no tenía la intención de ofender a nadie ...

SUI IURIS dijo...

Lo entiendo perfectamente. Creo que todos somos conscientes de que en todos lados existe un número que representa un minúsculo porcentaje de la población que pierde las formas y la educación, anteponiendo "su fiesta" a cualquier otra consideración. En cierto modo, es normal y se tolera bien un rato de vociferaciones, petardos y pitidos de claxon. Vivimos en comunidad y no hay otra ... hoy te tolero mañana me toleras. Lo fatal es que ese rato, esa minoría, lo prolongue durante horas y horas afectando gravemente al derecho al descanso de la gran mayoría; y añadidamente la fiesta se entienda en el sentido de tener patente de corso para causar daños al mobiliario urbano y a la propiedad ajena (papeleras destrozadas, vehículos aparcados con daños, jardines arrasados, puertas de edificios dañadas, etc.). Esas "fiestas" deberían salir muy caras a este tipo de festeros. La tolerancia también tiene su límite.

Bueno, quería decir que a mí no me habías ofendido en absoluto.